CUATRO PUNTOS PARA ALCANZAR EL ENVEJECIMIENTO ACTIVO DESDE NUESTRO ESPACIO VITAL
Conforme envejecemos, nuestro organismo experimenta
diversas modificaciones de tipo morfológico (en su forma), fisiológico
(funcionamiento), mental, psicológico y social, las cuales son generadas por
cambios propios de la edad y desgaste acumulado. A pesar de que lo antes dicho
no significa que ninguna etapa de la vida, ni siquiera la más avanzada, debe considerarse en sí misma enfermedad.
Cierto es que aumenta la vulnerabilidad ante el desarrollo de padecimientos
crónicos (de larga duración) y que la gente de edad avanzada se encuentra en
situación de desventaja en más de un aspecto, sin embargo es parte de la vida,
y como cada una de ellas existen modos para que su transitar sea de la manera
más óptima posible.
Además, en lo que se trata del “envejecer” existen
diferentes miradas. Algún pensador ha dicho que ni bien nacemos empezamos a
envejecer, lo que de algún modo es cierto pues el reloj empieza a correr. Otros
han considerado la vida del hombre como un camino con pendiente positiva en la
infancia, meseta al centro donde no hay grandes cambios físicos ni mentales, y
finalmente con pendiente negativa durante la vejez.
Ahora bien, si mantenemos como eje que el cerebro hace la
diferencia en nuestra vida, debemos enfocarnos en su envejecimiento para desde
allí, manejar las etapas. Por mucho tiempo se consideró la regla general que a
partir de los 40 años nuestro cerebro comienza a decaer en su funcionamiento.
Sin embargo, últimas investigaciones publicadas en la revista Psychological
Science establecieron que no existe un único pico de desarrollo cognitivo. Se
observan diferentes vértices de tareas cerebrales, que al traspasarlos, van
poco a poco perdiéndose en su eficacia. Sobre la capacidad para pensar
rápidamente, llega su pico de máxima actividad a los 20 años. Luego de ello
empieza a descender. La memoria a corto plazo alcanza su rendimiento superior a
los 25 años. Mientras que muchas otras tareas se alcanzan entre los 30 y 40
años. Mientras que la habilidad para empatizar con las emociones de otras
personas presenta un pico máximo de actividad entre los 40 y los 50 años. Pese
a todo, la buena noticia es que el cerebro puede mantener sus condiciones, o
gran parte de ellas a partir de entrenamiento activo.
El deterioro de las capacidades cognitivas de una
persona, tanto de la memoria como del pensamiento o del juicio, pueden llegar
al punto de interferir gravemente en las actividades de su vida diaria como en
sus familiares. Mantener la cabeza activa debe ser una prioridad.
Lo mismo ocurre con el envejecimiento en general. El
deterioro es angustioso, frustrante y pueden desencadenar aislamiento,
inactividad, depresión y otros tipos de enfermedad.
La OMS declaró el envejecimiento activo como “el proceso
de optimización de oportunidades de salud, participación y seguridad con el
objetivo de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen”.
¿Cuáles son las claves del envejecimiento activo?
En términos
generales se trata de equilibrar la balanza de nuestro cuerpo y mente de manera
activa en cada etapa de la vida haciendo hincapié en compensar los medios
faltantes o intentando destruir las barreras que se van presentando.
Por otro lado se trata de manejar el espacio de nuestra propia casa, ya que por lo general a medida que envejecemos más nos quedamos en nuestro espacio vital, conformándose un mundo más cerrado, casi un refugio donde guarecernos principalmente cuando surgen complicaciones de salud o de deterioro. Aquí la casa, aunque siempre debe ser el principal activo en salud, toma una jerarquía mayor, debiéndo ser no el lugar donde ocultarnos y sufrir dolencias, sino el sitio desde donde emerger, y controlar el mundo, pese a las dificultades, tal como lo impulsa la Salutogénesis aplicada al Diseño y la Arquitectura.
Des este modo existe un Plan de Envejecimiento Activo, que
establece Cuatro Puntos Activos, con los que se debe cumplir:
1. Primer
punto activo: La cabeza manda
·
La forma más eficaz de luchar contra el
deterioro del cerebro, es a través de la estimulación. Mantener y
ejercitar las capacidades cognitivas
(orientación temporal espacial y personal, el lenguaje, la percepción, el
razonamiento, la memoria, etc.) es fundamental para disponer de autoconfianza y
buen estado de ánimo. Ésto debe hacerse mediante algún tipo de entrenamiento
que ayude a mejorar la agudeza mental.
· Exigir al cerebro trabajo adicional, algo que podemos realizar desde nuestra casa.
2. Segundo
punto activo: El cuerpo acompaña
·
Es importante mantener el cuerpo en
movimiento. No solamente ayuda a la flexibilidad y al estado de salud física en
general sino también favorece la producción de neurotróficos. Estos hacen incrementar la plasticidad sináptica,
la neurogénesis y la vascularización del cerebro. Hace que se reduzca la
pérdida del volumen cerebral en la vejez, especialmente en el hipocampo,
involucrado en la memoria y el aprendizaje.
A veces resulta desmotivador o complicado para alguien mayor salir de su casa, es por eso que planear un espacio para realizar movimientos, o alguna práctica, debe ser de la partida.
3. Tercer
punto activo: Alcanzar un modo dinámico de enfrentar la vida :
todos tenemos estilos y actitudes de vida. Pero hay cuatro que deben fomentarse, aún más cuando por personalidad no nos son habituales:
·
Ser Social Potenciar
las capacidades sociales. Se debe llevar una vida productiva en la sociedad:
participación en asuntos sociales, económicos, culturales, espirituales,
cívicos, etc.
·
Tener proyectos
Todo proyecto es un reto. Y cada reto nos desafía a nosotros y a nuestro
cerebro, además ayuda a potenciar la concentración. La concentración es un
elemento imprescindible a la hora de marcarnos objetivos, planificarlos, y
llegar a la meta elegida
·
Jugar Las personas que
juegan se mantienen alertas mentalmente con el paso de los años. El juego engancha, ayuda a recuperar los
recuerdos, retrasa los efectos de enfermedades cognitivas. Mantiene la mente
activa, mejora la observación, fortalece la memoria y lucha contra el olvido y
fomenta el razonamiento.
·
Hacer tareas creativas La
creatividad influye positivamente en la resiliencia y así hace frente a los
deterioros de la edad
Cuarto punto activo: Estar en un entorno dinámico que nos acompañe: El entorno debe acompañar cada ritmo vital, modificándolo de ser necesario, eliminando barreras arquitectónicas, espaciales y agregando los accesorios necesarios. De esta manera se mantiene, prolonga y recupera la funcionalidad física, mental y social por medio del autocuidado y autogestión. De esto trata la Salutogénesis aplicada al Diseño y la Arquitectura. De encontrar en el espacio vital un recurso para mantenernos en pie.
Finalmente, un buen plan de envejecimiento activo mejora el bienestar
y calidad de vida de las personas a medida que envejecen, adultas y mayores,
favoreciendo en estas últimas las oportunidades de desarrollar una vida
autónoma y saludable incluso en la tercera edad.
El caso de La Neuróbica
Es una técnica
de entrenamiento cerebral, una gimnasia cerebral que ayuda a que nos esforcemos mentalmente,
a la vez que retarda el envejecimiento del
cerebro. Combina estrategias físicas, y mentales. Propone mejorar la atención,
concentración, habilidades, entre otras cosas, a través de resolución de
problemas, ejercicios físicos y cerebrales como rompecabezas, que pueden ser
realizados en cualquier momento y lugar. Aunque lo mejor es practicarlos a primera
hora del día, para activar el cerebro y reaccionar de mejor forma a las
situaciones que puedan surgir luego a lo largo del día. La técnica salió a la
luz en los años 60 por el doctor Paul Dennison, siendo redefinida tiempo
después por los científicos neurobiólogos Lawrence Katz y Manning Rubin. Hoy es
una técnica que aún se sigue perfeccionando y encuentra su sitio mostrando sus
distintas aristas en lugares y actividades tan diversas como tratamientos,
actividades recreativas, técnicas de aprendizaje y juegos. De hecho no importa
la vía, lo importante es que incorporemos sus beneficios, que se basan en
reconocer que el cerebro se compone de dos hemisferios, el derecho y el
izquierdo; y que la meta de la gimnasia cerebral es, mediante la ejercitación, lograr el dominio total de la mente y el
cuerpo para buscar el equilibrio y armonía. Una técnica que con toda seguridad puede realizarse desde nuestra propia casa.
ALGUNAS
DE LAS FUENTES CONSULTADAS: L. Mishara y R.G. Riedel, EL PROCESO DE
ENVEJECIMIENTO , Morata, Madrid (1986)/ Richard A. Kalish, LA VEJEZ,
PERSPECTIVAS SOBRE EL DESARROLLO HUMANO, Madrid (1983)/Franco Módenes, P.,
& Sánchez Cabaco, A. SABER ENVEJECER: ASPECTOS POSITIVOS Y NUEVAS
PERSPECTIVAS (2008)/Giró Miranda, J. ENVEJECIMIENTO ACTIVO, ENVEJECIMIENTO
POSITIVO (2006)/ A. Kristensen, B, LIBRO BLANCO DEL ENVEJECIMIENTO ACTIVO
(2007)/ Yuni, José & Urbano, Claudio, ENVEJECER APRENDIENDO.CLAVES PARA UN
ENVEJECIMIENTO ACTIVO/ Lawrence Katz y Manning Rubin, KEEP YOUR BRAIN ALIVE (2014)/REVISTAS VARIAS